Muchos hongos silvestres, como la ostra, el shiitake y la trompeta, se cultivan en granjas y son silvestres solo de nombre. Las versiones comercialmente criadas conservan el mismo sabor a hongos sin restricciones que sus contrapartes que crecen en la naturaleza. Busque las variedades de hongos silvestres en su supermercado local. Algunos de estos se pueden encontrar frescos o secos. Muchas variedades en la naturaleza, incluidas algunas que parecen idénticas a los tipos comestibles familiares, son venenosas y pueden ser dañinas, incluso fatales, para comer. La compra de hongos silvestres en un supermercado asegura que obtendrá solo los que son seguros para comer.
